lunes, 2 de marzo de 2009

Proverbio judío

En mi casa, de toda la vida, ha habido almanaques de ésos en los que se van quitando las hojas del calendario a medida que pasan los días. En cada hojita se puede leer una frase. Me gusta leer estas sentencias porque nos invitan a pensar un ratito cada día. La del día 28 fue este proverbio judío:
" Con una mentira suele irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver".

Lo relacioné con mi vida y con la de las personas que conozco, con los acontecimientos. Cuánta verdad en tan pocas palabras.

Más tarde, al ver el telediario, escuché, no sin asombro, más propaganda antisemita. Nada de decir que Hamas rechazó ese día la demanda de la nueva secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, de reconocer el derecho de Israel a la existencia. Por el contrario, los medios no paran de decir que qué malos son los judíos y qué buenos son los palestinos terroristas.

No me trago esa propaganda antisemita. No me la trago porque es mentira. Y me pregunto qué ganan los medios propagando falsedades que sólo llevan al suicidio de nuestra cultura.
Porque nuestra cultura, mal que les pese, tiene raíces judeocristianas y grecorromanas, a las que les debemos, entre otras cosas, la Democracia, los Juegos Olímpicos, el progreso en las Ciencias y de las Artes, el Teatro...

Sin esperanzas de volver, eso está claro.

2 comentarios:

Gurb dijo...

Tenemos el mismo calendario...

Anónimo dijo...

A menudo me he preguntado porqué el pueblo judío ha sufrido tantas persecuciones. Porqué hoy a pesar de ser considerado un Estado, lo sigo viendo como un pueblo nómada, como en sus orígenes.

Porqué ha sido tan admirado por algunos, tan despreciado por otros, a todos los niveles: político, religioso,cultural, económico...

Lo cierto a día de hoy, es que siguen despertando amores y odios, pero a casi nadie le son indiferentes.

No hay una única verdad, ni una única mentira. Ni unos son tan buenos, ni otros tan malos. Pero lo que sí podemos comprobar actualmente y echando la vista atrás, es que siguen buscando su tierra prometida. Ellos se consideraban el pueblo elegido por Yavhé, y ahí comenzaron sus problemas. Fueron nómadas mucho tiempo, fueron perseguidos y lo siguen siendo,con el terrorismo de los extremistas palestinos. Pero ellos también han sido tajantes y extremistas en su religión y en los aspectos políticos. Desde que se repartió la tarta, tras finalizar la 2º guerra mundial, se agudizaron los problemas, todavía no resueltos respecto a la famosa tierra prometida.
Resulta curioso preguntarse si su Yavhé sabía de antemano, todo lo que le esperaba al pueblo judío, a su pueblo elegido...
Besos
Come L Acqua