domingo, 21 de septiembre de 2008

Doña necesidad

Cuando estudiaba, vivía en el piso de una señora ya mayor, muy sabia y llena de bondad. Ya murió, y no hay día que no la recuerde. Miles de cosas me enseñó, nos enseñó aquella mujer buena y sabia. En los ataques de pereza que me daban, ella siempre me decía:
-No te preocupes. Cuando llegue el momento, doña Necesidad vendrá a echarte una mano y terminarás haciéndolo todo.
Cuántos trabajos, cuántos exámenes, cuántas cosas hemos hecho doña Necesidad y yo juntas. Me ayudó tanto... Hasta lo que parecía que no iba a salir, terminaba saliendo.
Doña necesidad, te necesito. Ven a echarme una mano, a echárnosla, q se nos echa el mes encima.

2 comentarios:

Gurb dijo...

jajajajajajajajajajajajaja, no te preocupes, que todos andamos igual, no te preocupes que doña necesidad llegará, tranquila Nusa, todo saldrá por que así está escrito y por que siempre fue así.

Besos y abrazos.

Si los porqués están mal escritos me lo dices, que ya los corrijo.

muaaaaaa.

Nusa dijo...

jajajaja amigo. Estoy segura de que los porqués los pones adrede jajajaja
Sí, doña necesidad aparece siempre
... Hasta ahora, así ha sido
¡Besos restallaos!